MAPPA: Explotación Laboral en el Estudio Conquistó al Mundo

Photo of author

By Candy Zevallos Asiú

Compartir la nota

El estudio MAPPA se ha convertido en uno de los nombres más reconocidos en la industria del anime, gracias a obras aclamadas como Attack on Titan: The Final SeasonJujutsu KaisenChainsaw Man y Vinland Saga. Sin embargo, detrás de su éxito y la calidad visual de sus producciones, se esconde una realidad preocupante: la explotación laboral de sus animadores. Este problema, que ha sido denunciado en múltiples ocasiones, pone en evidencia las condiciones precarias que enfrentan los trabajadores en una de las industrias más demandantes del entretenimiento.

El Ascenso de MAPPA: Calidad Visual a un Alto Costo

Fundado en 2011 por Masao Maruyama, antiguo director de Madhouse, MAPPA rápidamente se posicionó como un estudio innovador, dispuesto a asumir proyectos ambiciosos y arriesgados. Su enfoque en animación de alta calidad y su capacidad para adaptar mangas populares le han valido el reconocimiento de fans en todo el mundo. Sin embargo, este éxito ha venido acompañado de una carga insostenible para sus animadores.

En los últimos años, empleados y ex empleados han denunciado condiciones laborales extremas, incluyendo jornadas extenuantes, plazos de entrega imposibles y salarios bajos. Estas prácticas no son exclusivas de MAPPA, pero el estudio se ha convertido en un símbolo de los problemas estructurales de la industria del anime.

Denuncias de Explotación Laboral

En 2021, durante la producción de Attack on Titan: The Final Season, varios animadores revelaron que trabajaban hasta 14 horas al día, sin días libres, para cumplir con los plazos de entrega. Algunos incluso admitieron que dormían en el estudio para ahorrar tiempo. Estas condiciones, lejos de ser excepcionales, son comunes en la industria, donde los animadores suelen ser contratados como freelancers, sin beneficios laborales ni seguridad social.

Sin embargo, el punto de quiebre fue en la producción del arco de Shinjuku de Jujutsu Kaisen. La producción tuvo pausas por pedido de los animadores 2 veces y quedó fuera de la programación prometida. Los mismo animadores comenzaron a hablar más abiertamente sobre la terrible situación laboral a través de twitter, a veces borrando sus publicaciones.

Además, los salarios en MAPPA (y en la industria en general) son notablemente bajos. Según un informe de la Asociación Japonesa de Animadores, el salario promedio de un animador junior es de aproximadamente 1.1 millones de yenes al año (alrededor de 7,500 dólares), muy por debajo del promedio nacional en Japón. Aunque MAPPA ha intentado mejorar su imagen ofreciendo bonificaciones y aumentos salariales, muchos argumentan que estas medidas son insuficientes para compensar las exigencias del trabajo.

En una dimensión paralela

Con las críticas a rojo vivo, el seo de Mappa y principal artífice de su éxito, Manabu Otsuka, dio una entrevista que preocupó a los fanáticos del anime. En una entrevista en 2023, justo en medio de la producción de Jujutsu Kaisen y las renuncias de algunos animadores, Otsuka habló de su ambición de expandir el estudio y se comparó con Ufotable y Kyoto Animation.

Además de las denuncias por explotación, Otsuka parecía olvidar algo fundamental: esos estudios son famosos por su gran animación, pero también por solo trabajar muy pocos proyectos en un mismo año. Por el contrario, en el 2023 Mappa lanzó varios proyectos: Vinland Saga temporada 2, Campfire Cooking in Another World with My Absurd Skill, Jujutsu Kaisen temporada 2, Hell’s Paradise: Jigokuraku, y Attack on Titan: The Final Season Parte 4.

Manabu Ōtsuka, SEO de Studio MAPPA

El Futuro de la Industria del Anime

La situación en MAPPA ha generado un debate más amplio sobre el futuro de la industria del anime. Fans y profesionales están pidiendo cambios estructurales, como una mayor regulación laboral, salarios justos y plazos de producción más realistas. Algunos han sugerido que los espectadores también tienen un papel que desempeñar, apoyando estudios que traten a sus empleados de manera justa y exigiendo transparencia en las prácticas laborales.

Mientras tanto, MAPPA sigue siendo un estudio líder en la industria, con proyectos altamente anticipados en su pipeline. Sin embargo, su legado estará marcado no solo por sus impresionantes animaciones, sino también por las voces de los animadores que han sufrido para hacerlas realidad.

El éxito de MAPPA es innegable, pero su historia también sirve como un recordatorio de los costos humanos detrás del anime que tanto amamos. A medida que la industria continúa creciendo, es crucial que se aborden estos problemas para garantizar un futuro sostenible y justo para todos los involucrados. Los fans, los creadores y los estudios deben trabajar juntos para construir una industria que valore tanto a sus trabajadores como a sus obras.

¿Qué opinas sobre este tema? ¡Déjanos tus comentarios y únete al debate sobre el futuro de la industria del anime!

Dejá un comentario